La Ville en Rose
Los suaves colores pastel dominan los edificios de la bella Toulouse, una ciudad fascinante que se refleja en las aguas del Garona.
Toulouse, ciudad del Canal du Midi, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, encarna la esencia misma de esta ciudad. Un lugar para descubrir despacio, entre un paseo por la orilla del río, o en pleno centro histórico.
Saint-Sernin, Capitole, el Convento de los Jacobinos. Y, de nuevo, el sugerente Pont-Neuf, los interesantes museos, y los numerosos parques y pulmones verdes, ideales para unas vacaciones en familia, y para unas horas de relax.
El ambiente cosmopolita y el elevado número de estudiantes hacen de Toulouse una ciudad ideal también para los jóvenes. Zenith y Cri de la Mouette son los lugares de música en vivo. Las discotecas y clubes repartidos por la ciudad son ideales para retozar y divertirse hasta altas horas de la noche.
La Ville en Rose mezcla a la perfección todos los ingredientes, para unas vacaciones aptas para todos los usos y todos los gustos.
Sin duda la solución más cómoda, rápida y, muchas veces, también la más económica.
El avión representa la solución ideal para llegar desde distancias medias/largas y destinos internacionales.
La ciudad cuenta con un importante aeropuerto internacional, ubicado a poco menos de 7 km al noroeste.
Con alrededor de 10 millones de pasajeros en tránsito cada año, es el sexto aeropuerto más importante de toda Francia.
Excelentes conexiones directas con los principales destinos europeos. Igualmente altos son los estándares de calidad de los servicios para familias y personas con movilidad reducida.
Toulouse-Matabiau es la principal estación de tren de la ciudad, situada en el centro y bien comunicada con el resto del país.
El edificio fue inaugurado a principios del siglo XX.
Alrededor de 10 millones de pasajeros pasan por aquí cada año.
El tren es una excelente solución para llegar a la ciudad, especialmente desde distancias medias. Desde aquí, de hecho, hay numerosas líneas Intercity y TGV que conectan Matabiau con Carcassone, Montauban, París, hasta la Barcelona española.
La estación también está conectada, por dentro y por fuera, con la línea A del metro.
La ciudad francesa está servida por una red de carreteras y autopistas particularmente moderna y eficiente que le permite llegar desde todo el país.
La autopista A20 es la arteria principal que le permite llegar a París por el norte. El recorrido total es de unos 680 km.
Marsella, al este, está a unos 400 km, vía Montpellier.
Como se necesitan muchos para llegar desde Barcelona, cruzando la frontera por Le Perhus. Alternativamente, puedes pasar por Andorra, a unos 200 km.
Burdeos, al noreste, en cambio, está a sólo 250 km, casi exclusivamente por la A62, con un tiempo de viaje de unas dos horas y media.
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